El 22 al 26 de septiembre en Turín vuelve Terra Madre Salone del Gusto, el evento internacional más importante dedicada a la cultura alimentaria.
Una edición especial no sólo porque se celebran 30 años de actividades de Slow Food en Italia y 20 años desde el nacimiento de la primera edición del internacional Salone del Gusto, pero debido a los organizadores y colaboradores técnicos se han fijado un objetivo muy ambicioso: llegar a 70% recogida selectiva.
Además, este año la iniciativa se mueve por primera vez en el corazón de Turín, dejando el centro de exposiciones, al encuentro del público e involucrar a toda la ciudad.
El proyecto de sostenibilidad ambiental del Internacional Salone del Gusto y Terra Madre, se ha desarrollado y mejorado continuamente edición tras edición, convirtiéndose en un modelo que ha hecho la escuela para muchos otros eventos nacionales e internacionales.
Desde 2006, el Proyecto Transdisciplinario “Eventos de reducido impacto ambiental” ha dado lugar a la aplicación progresiva de las estrategias sostenibles con el medio ambiente, ya una mejora continua de la optimización del rendimiento del consumo de energía y materiales, evitando el desperdicio en el primer lugar.
Para el año 2016, un papel central en la sistémica y la reducción del impacto ambiental, es el salón-de-sabor-2016 , que confió el diseño de recogida de residuos, desarrollado con la colaboración de Amiat Novamont y centrandose en el envasado de alimentos lleva a cabo desde muchas ediciones los consorcios, Comieco y Rilegno.
Se presentará la colección de islas ecológicas, tripulada por voluntarios de Legambiente, a la que se agrega el servicio a los expositores de la Ciudad Eco.
Con soporte para Ecozema y nuestro distribuidor Eco Technologies, como en ediciones anteriores, se proporcionará vasos, platos y cubiertos totalmente compostables.
El lema de Terra Madre del Gusto 2016 “Voler bene alla terra” encarna el corazón de las actividades de Slow Food en el mundo “Amar la tierra es cuidar, atender con amabilidad y amor. Cultivar y cuidar el medio ambiente debe ser el sello distintivo de este momento”, dijo Carlo Petrini, presidente de Slow Food.